El envejecimiento es un fenómeno natural, empezamos a envejecer desde el mismo momento en que nacemos; aunque en ciertas etapas de nuestra vida dicho concepto no se pasa por nuestra mente, es algo inevitable y un reto al cual todas las sociedades se enfrentan a nivel mundial, nacional y local; esto, debido a los cambios demográficos y poblacionales reflejados en un aumento en la expectativa de vida, que en muchos casos acarrea también problemáticas de salud física, mental, sociales y culturales.
El mundo está experimentando una transformación demográfica: para el 2050, el número de personas de más 60 años aumentará de 600 millones a casi 2.000 millones, y se prevé que el porcentaje de personas de 60 años o más se duplique, pasando de un 10% a un 21%. Ese incremento será mayor y más rápido en los países en desarrollo, donde se prevé que la población adulta mayor se multiplique por cuatro en los próximos 50 años. (Datos antes de la pandemia)
Ahora bien, según un estudio del Ministerio de Salud de Colombia del 2019, el 11% del total de la población tiene más de 59 años y el 50% de la población mayor a 60 años se encuentra entre los 60 y 66 años de edad. Esto ha significado un crecimiento anual del 3,5%; según dicho informe, esta situación puede deberse a: disminución de la fecundidad, disminución de la mortalidad y aumento de la expectativa de vida en el país.
Es importante tener en cuenta que el envejecimiento poblacional es heterogéneo en todo el territorio nacional, por tanto en cada departamento y municipio hay una interpretación propia de esta etapa de la vida, en algunos lugares se ha asemejado vejez con enfermedad y de ahí se deriva un error en cómo se afronta y se disfruta de este momento de la vida que puede ser el ideal del ser humano.
Por esta razón, es importante generar un nuevo concepto de vejez, desestigmatizar y empezar a modificar comportamientos en las personas que conlleven al largo plazo un mejor proceso de envejecimiento. Partiendo del concepto de que el envejecimiento es el conjunto de transformaciones y/o cambios que aparecen en el individuo a lo largo de la vida, es la consecuencia de la acción del tiempo sobre los seres vivos. Los cambios son bioquímicos, fisiológicos, morfológicos, sociales, psicológicos y funcionales; este proceso también se ve afectado por las enfermedades padecidas, el sufrimiento acumulado a lo largo de la vida, el tipo de vida que haya llevado la persona y los factores de riesgo y ambientales a los que ha estado sometida; aunque no se trata solo de factores, sino de genes que también tienen mucha importancia.
El mayor temor de las personas al envejecer no es la muerte, sino el perder la autonomía y la capacidad de decisión en sus entornos familiares y redes sociales; muchas veces la desvinculación laboral genera menor interacción social, por tanto se deben buscar nuevos espacios activos para las personas mayores, además, el adulto mayor en ocasiones aumenta su preocupación por sí mismo, disminuyendo el interés emocional por los demás.
La vejez es una de las etapas de la vida: la última, donde el ser humano ha alcanzado su máxima expresión de relación con el mundo; ha llegado a la madurez total a través de una gran cantidad de experiencias vividas durante los momentos e instantes disfrutados; por ello es importante abordar el envejecimiento desde temprana edad para poder lograr una mejor vejez.
“Tu cuerpo envejece sin tu permiso. Tu espíritu envejece si tú se lo permites”.
Autor desconocido



