Plan Maestro Férreo debe contemplar el ‘Ferrocarril del Catatumbo’

A propósito de las actividades encaminadas a la celebración del `Bicentenario de Colombia´ a cargo de la Vicepresidencia de la República, es trascendental retomar esta oportunidad para que los nortesantandereanos, además de celebrar con fanfarrias esta conmemoración, planteemos a la Gobernación, pero especialmente al Gobierno Nacional, Viceministerio de Infraestructura en el Ministerio de Transporte, INVIAS, Planeación Nacional, Agencia Nacional de Infraestructura -ANI, entre otros, que estamos a tiempo para lograr un verdadero hito histórico que proyecte en el espacio fronterizo y en el tiempo logístico, verdaderos y visionarios ecos de desarrollo basados en el sistema regional de transporte ferroviario.

Aprovechar que nos detenemos en esta conmemoración para mirar atrás, situándonos en la historia del único ferrocarril privado que tuvo el país: el Ferrocarril de Cúcuta, y desde allí volver a abordar el Ferrocarril del Oriente Colombiano a través de las estaciones del tren que continúan en pie y que se pueden adecuar con base en la línea original que tendría como opción real el trazado de la cuenca del río Catatumbo.

Si bien el Plan de Desarrollo Departamental (PDD) para Norte de Santander 2020-2023 solo lo enunció como iniciativa regional sin que constituyese parte fundamental para reencausar la coyuntura económica y sociopolítica nacional e internacional de la región, habida cuenta de no hacer parte de los capítulos materia de ejecución del PDD, llámese `Infraestructura´ o `Proyectos Bandera´, para continuar apalancando el sistema carretero como única opción de movilidad y de conectividad entre el departamento y el resto del territorio nacional.

Aquí lo importante es que es el momento (antes de finalizar el mes de marzo de 2021), para que nuestros mandatarios locales y regional, con sus entidades territoriales, congresistas del departamento, la ALR, con una vinculación parcial pero destacada de empresarios y de las universidades locales, inserten el corredor férreo nortesantandereano en el Plan Maestro Férreo (PMF), que fue aprobado en noviembre de 2020, exigiendo como verdadero regalo Bicentenario, la gestión de los recursos para los estudios de la ruta de impacto nacional que cubre el Ferrocarril del Catatumbo, ante  las mismas entidades del Gobierno Nacional que coinciden con su celebración.

Es el momento para buscar las entidades inversionistas nacionales y extranjeras que permitan plantear la bitácora férrea que urge para recuperar este importante sistema en nuestro departamento, incorporándolo definitivamente al PMF y a las acciones previstas para confirmar “la reactivación y consolidación de la operación ferroviaria del país”, de tal suerte que se incluya este corredor en el presente proceso a través del cual serán reglamentadas las condiciones económicas, técnicas y operativas que recuperen o adecúen el trazado férreo necesario para implementar las estrategias inherentes a la logística intermodal, también objetivo fundamental del Plan Nacional de Desarrollo (PND – “Pacto por Colombia, Pacto por la Equidad”).

El país y Norte de Santander tienen un compromiso de revitalización del tejido social basado en la infraestructura a lo largo de la ruta del ferrocarril del Catatumbo, reactivando  la cultura del transporte sobre rieles que ubica desde ya a cualquier país en el mapa de la competitividad con sistemas masivos de transporte tales como el tren ligero, el tranvía, en nuestro caso tanto en el Área Metropolitana de Cúcuta (AMC) como en todo el departamento.

No podemos quedarnos una vez más por fuera del tren del progreso que se va a catapultar como reacción al grave impacto global que ha dejado la pandemia en todos los ámbitos del territorio nacional, siendo lo único cierto para todos que este esfuerzo demanda una intervención con urgencia y en igual medida, del liderazgo institucional apoyado por la capacidad de gestión y el aporte profesional de fuente regional, así como del apoyo de la academia, gremios, y movimientos en curso, pero especialmente de toda la sociedad civil empresarial. La Fundación Conexión-Región (FCR) está lista para acompañar este proceso.