El presupuesto de la Nación en los tiempos del Covid

El pasado mes de julio se radicó en el Congreso el proyecto de ley que busca definir el presupuesto general de la Nación para el año 2021. Si bien anualmente se presenta este proyecto, el de este año tiene muchas particularidades debido a la emergencia sanitaria y a la reactivación económica que deberá implementar el gobierno tan pronto superemos el pico de la pandemia.

A continuación, relacionaré algunos puntos claves para tener en cuenta, y que sea cada lector el que saque sus propias opiniones y conclusiones respecto al precitado proyecto de ley:

• En los últimos meses hemos escuchado hablar de que el PIB caerá aproximadamente un 5,5%, pero que podría llegar al 10%, por efectos del Covid-19 sobre la economía del país, entre otras cosas por el confinamiento no solo prematuro sino más prolongado que en cualquier otro país.

• Si bien el país va a estar afectado y el producto interno caerá entre 5 y 10%, el presupuesto del país aumentará en un 15%, pasando de 271,7 billones, a 313,9 billones de pesos, lo que tendría una explicación lógica, si tenemos en cuenta las grandes inversiones que se deberán hacer en salud y reactivación económica.

• Dentro de este rubro, se destinarán 76 billones de pesos al servicio de la deuda, 40% más que lo aprobado para el año 2020. Este punto en particular no deja de ser preocupante, pues con un petróleo a 40 dólares promedio el barril diario, y varios proyectos suspendidos, el Estado percibirá menos ingresos por concepto de renta de capital de la estatal petrolera Ecopetrol, así como seguramente menos ingresos por concepto de “mayor producción”, lo que podría significar que los colombianos tal vez debamos sacar de nuestro bolsillo, a través de impuestos, para cubrir la deuda pública. Otra opción sobre la mesa es la enajenación de algunas empresas estatales para cubrir la deuda.

• De aprobarse el proyecto de ley en el Congreso de la República, entidades como la DIAN, y la Contraloría General de la República aumentarían su presupuesto considerablemente, lo que está bien, si tenemos en cuenta que estas entidades son las que respectivamente combaten la evasión de impuestos y la corrupción en el sector público, velando por el buen uso del recurso y su ejecución. También veremos otras entidades con aumento en su presupuesto como lo es el Ministerio de Justicia, lo que fortalecería el acceso a la misma, una de las grandes falencias del país desde hace varias décadas, así como uno de los pilares del Plan de Gobierno del Presidente Duque: legalidad + emprendimiento = equidad. 

• Si bien algunas entidades aumentan su presupuesto, algunas otras lo disminuyen, como lo es el Ministerio de Agricultura y sus agencias adscritas, lo cual haría pensar, por lo menos inicialmente, que una vez más los campesinos estarían en el segundo plano de una eventual reactivación económica. Por otro lado, sorprende que Presidencia de la República disminuirá su presupuesto en 500.000 millones de pesos, monto considerable y que sorprende, no solo por la cifra, sino porque hasta ahora hayan realizado esta disminución y no desde el inicio del gobierno Duque; cuando el actual partido de gobierno estaba en la oposición, fue duro y crítico por lo ostentoso y “derrochón” que fue el Palacio bajo el mandato de Juan Manuel Santos.

• Es necesario tener en cuenta que como consecuencia del estado de emergencia económica y social producto del Covid-19, el Gobierno por medio del Comité de Regla Fiscal congeló la regla fiscal de las vigencias 2020 y 2021, es decir, no habrá tope de endeudamiento para el Gobierno nacional. Las condiciones de este congelamiento están establecidas más ampliamente en el documento de Marco Fiscal de Mediano Plazo, el cual plantea un déficit de 5% del PIB para 2021; esto significa que el aumento del gasto público, si bien no tiene tope, debe tomar como referencia este indicador. 

• Por último, hay que observar la forma en que se destinarán estos elevados recursos. Si se canalizan a través de incentivos, subsidios y financiamientos que lleguen directamente a las manos de pequeñas, medianas y grandes empresas, así como a personas naturales, o si por el contrario estamos ante una especie de estatización, donde el Estado asumirá directamente el papel de generar empleo, inversiones, proyectos, como manera de dinamizar la economía.

Estos son los puntos clave para tener en cuenta de cara al año 2021, donde realmente podremos ver las dimensiones de la emergencia económica, una vez se haya superado la emergencia sanitaria. Saquen sus propias conclusiones, con los precitados hechos fácticos, especulen, opinen, analicen, debatan, pero lo más importante…  recen todo lo que se sepan porque el golpe va a ser duro.