Hoy: Lun, marzo 17 2025

TÉCNICOS

Desde hace meses venía teniendo problemas con la nevera de mi apartamento. La nevera es una nevera que heredé de la casa de mis papás, ya que como todos saben, empezar un hogar de cero es bastante difícil. Pues bien, como todas las cosas con algunos años de uso, la nevera empezó a presentar fallas. Intenté arreglarla con varias empresas de la ciudad que promocionan sus servicios de mantenimiento de electrodomésticos, que enviaban a sus “técnicos” de forma desordenada, sin un buen trato al cliente, incumpliendo citas y en tres oportunidades sin lograr dar con el problema de fondo y arreglar la nevera definitivamente. Cansado de la situación y a punto de botar la nevera para con un tarjetazo ir a comprar una nueva, decidí consultar en un chat familiar si alguien tenía algún buen técnico de electrodomésticos por recomendar. Un tío respondió mi solicitud con el contacto de un técnico del SENA. Decidí intentar una última vez arreglar la nevera, antes de optar por comprar una nueva ya que la situación no está nada fácil. Y me llevé una sorpresa muy grata. El técnico del SENA, de aproximadamente 25 años, llegó en su propio carro, con botas y overol, presentando sus pagos de seguridad social en la entrada del edificio y con todo el conocimiento en la materia. En 1 hora solucionó el problema, cambió dos repuestos, nos indicó cuál era la situación y nos mostró que los anteriores arreglos habían sido mal hechos. Mi esposa logró interrogarlo, él le contó que desde que se graduó como técnico en el SENA, empezó con esas tareas. Maneja una microempresa personal con un amigo. Él se dedica a arreglar neveras y electrodomésticos de cocina, el amigo está más por el lado de los aires acondicionados. Para no quedarle mal a los clientes, él programa 4 o máximo 5 turnos al día. Dos por la mañana y dos por la tarde. Cobra 70 mil pesos por visita más los repuestos que necesite cada electrodoméstico, los cuales solicita telefónicamente a su bodega y llegan antes de media hora al lugar en donde está prestando el servicio de reparación. Si le sacamos cuentas, el técnico está promediando los doscientos cincuenta mil pesos al día, que trabajando 5 o 6 días a la semana se acerca al millón doscientos mil pesos a la semana y a los cinco millones de pesos mensuales. Bastante interesante. Decidí escribir sobre esta historia casera, porque creo que allí está gran parte de la solución al problema laboral colombiano. En Colombia por supuesto que debemos promover la creación masiva de empleo en las empresas mediante políticas de flexibilización laboral e incentivos a las mismas para contratar jóvenes, pero debemos reenfocar el sistema educativo del país. En Colombia todo el mundo quiere ser profesional y nos estamos llenando de abogados, médicos, arquitectos e ingenieros que engrosan las filas de desempleo mes a mes y que cuando lo consiguen deben hacerlo por salarios bajos que no motivan a nadie. Para la muestra este ejemplo. Mientras que conozco decenas de profesionales trabajando por menos de dos millones de pesos mensuales, que las empresas en su mayoría pagan con mucho esfuerzo por los costos adicionales que esto acarrea, un técnico especializado en una labor bastante específica y que ejecuta con organización y destreza, logra un ingreso bastante interesante y mucho mayor al del profesional promedio. Si extendiéramos esto a otros campos como la mecánica automotriz, la industria de alimentos, la especialización de las labores de construcción y por supuesto todo lo relacionado con la programación de software de los diferentes lenguajes y sistemas que pululan en el mundo debido a la cuarta revolución industrial, estaríamos hablando de otra realidad. A nivel local, el Centro Tecnológico de Cúcuta ha venido modificando su estructura curricular en este sentido, e iniciativas como cursos de inglés (que son tan importantes para estas carreras técnicas) promovidas en la presente administración desde las secretarías de Desarrollo Social y el Banco del Progreso están dando pasos en la dirección correcta. Sin embargo, el esfuerzo debe ser más profundo, más articulado con el SENA que es una de las entidades más importantes del país y más constante. Si no cambiamos el enfoque de la educación, será común seguir viendo “doctores” varados en lugar de técnicos ocupados.

JUAN FRANCISCO YAÑEZ D.

Ingeniero Civil e Ingeniero Ambiental MSc. Ingeniería y Gerencia de Proyectos de Construcción Universidad de Los Andes, Colombia.
Twitter: @juanfrayadel

148 comentarios en “TÉCNICOS”

  1. Definitivamente. El personal tecnico bien entrenado en aula y Campo aporta mucho mas para si y para el entorno empresarial que lo requiere. Se convierten en expertos. Son formales, analizan, apuntan, atacan el problema y resuelven. Por Los tiempos y costos que nos ahorran, se les paga Bien.

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